viernes, 28 de septiembre de 2007

Discriminación 2.0





¿Qué es la discriminación?

Es tratar a una persona de manera distinta, pensando que en cierto modo es inferior a ti.

¿Quién discrimina?

Depende. Las personas discriminamos según conveniencia. Sin ir más lejos les contaré un ejemplo que me paso hoy mismo.

Las mujeres, por ejemplo, hablan de igualdad de derechos, pero ¿a cuantas has escuchado hablar de igualdad de responsabilidades?

La verdad des que la petición es si es bastante injusta en contra de los hombres y están combatiendo la discriminación previa hacia ellas con discriminación inversa hacia nosotros.

En esta época en donde aparecen los “Metrosexuales”, entes andrógenos que combinan a conveniencia femenina la homosexualidad y la heterosexualidad. Entes capaces de ser sensibles y recios a la vez, capaces de ir de shopping y no aburrirse, etc.

Pero, ¿Qué pasa con ser “hombre”?

Ser tal y como uno es, que te guste el fútbol, las cervezas y la violencia en las películas, etc. Ser desordenado, no comprender cada mirada y no entender la complicada trama sublimizar de la muerte de un tipo que dura toda una película de tres horas y cosas así.

Lamentablemente vivimos en un mundo donde a estas alturas los hombres tenemos que disculparnos por actuar como hombres, es una verdadera pena, pero de este tema hablaré en otras oportunidades.

En este punto de la historia una mujer feminista se asocia con una mujer evolucionada y fuerte, mientras que un hombre machista un tipo retrógrado y débil.

En lo personal me considero más cercano a ser machista que a ser uno de esos metrosexuales, y de eso no me avergüenzo ni lo escondo. Aunque no lo quieran admitir la gran mayoría de los hombres lo somos, pero pocos lo admiten sinceramente. Y un dato: la caballerosidad proviene del machismo, si no creyéramos que las mujeres son “inferiores” en ciertos aspectos las trataríamos igual que a los hombres, pero como pensamos que hay cosas que no pueden lograr, nosotros les ayudamos, las atendemos y cuidamos, pero de nuevo, eso es para otra oportunidad.

Para bien o para mal, los pensamientos feministas nos plantean que somos todos iguales, no importa si tienes testículos u ovarios y si ampliamos ese pensamiento deberíamos pasar a un estado en donde no existiesen discriminaciones de ningún tipo. No importa si eres blanco o negro, o incluso si eres un dálmata. No importa si eres una persona “normal” o un discapacitado, en cualquier forma: mental o física. No importa si eres hetero, homo u bi sexual. Todos deberíamos ser iguales. ¿No crees?

Volviendo a lo de la experiencia de hoy. Les cuento que hice un pequeño experimento y es lo que motivo a volver a escribir.

Como ya varios de los que me conocen soy una persona a la que le gusta debatir y muchas veces cuando alguien expresa una opinión públicamente me gusta llevarle la contra, a pesar de que mi opinión personal sea idéntica a la de esa persona. Me gusta ver como defiende su opinión, cuales son sus fundamentos y cuales son las causas del mismo.

Una compañera, bueno mejor dicho tres, estaban hablando y en eso ella se jacta de no temerle a ningún hombre, por lo cual la felicito y en lo personal creo que ninguna mujer debería temerle a ningún hombre. Antes de continuar los ubico en el contexto, hablaban de una joven de 16 años que era golpeada por su pareja de 23 y quien finalmente la mató. En este contexto ella afirma que ella golpea cualquier hombre sin ningún temor (en este punto la cara de las demás a mis ojos se convirtió en la cara de esas negras de películas que dicen “YOU GO GIRL!” como la de la foto que esta al comienzo de esta entrada al blog). Le planteé el punto de vista opuesto ¿Tiene el hombre derecho a defenderse de la violencia femenina con violencia? Y al mismo tiempo, y para ver sus reacciones, le planteó que yo creo que sí. Que no esta mal y que es hasta justo.

Explico este punto y de lo que avale para plantearlo.

Si apruebas la violencia como un agente resolutivo de problemas, no deberías ver géneros, ni color, ni nada. Al final de cuentas es violencia entre dos personas.

Si estas en contra de la violencia de la violencia esto debería ser en todo ámbito, no debería cambiar dependiendo de ningún factor, ni genero, ni raza, ni nada.

Mi opinión sobre la violencia es compleja, por lo tanto la explicaré de mejor manera en una próxima oportunidad. Pero en resumen creo que es un factor resolutivo y también educativo, pero que es y siempre será el último recurso. La verdad es que no lo creo por ideología ni por filosofía propia, es por la práctica y por como funciona el mundo. Es por eso que hay peleas entre familiares, personas desconocidas, grupos, pandillas, naciones, etc. Creo que si alguien te arremete debes defenderte y si es de forma verbal o física depende de tus posibilidades, de la gravedad de la agresión y de la situación global. Pero siempre evitar la violencia, en cualquiera de sus formas.

Pero bien, ¿Cuál fue la reacción a mi pequeño experimento?

Todas las presentes opinaron que la violencia de la mujer hacia el hombre era “aceptable” y “justificada” en la mayoría de los casos, ya que generalmente nosotros nos la “buscábamos” y nos la “merecíamos”. Pero que al revés, hombre contar mujer, era inaceptable, bajo ningún punto de vista posible era “justificada” o “merecida”.

ESO ES DISCRIMINACIÓN

Ten en cuenta (y con esto termino esta entrada a mi blog) que la igualdad de derechos debe conllevar igualdad de oportunidades y de responsabilidades y obligaciones, en definitiva una verdadera igualdad. Si quieres igualarte a otra persona, ya sea subir o bajar de nivel (si lo que haces es subir o bajar el nivel para igualarte, depende totalmente de tu opinión respecto a quien o a que busca igualarte) debe ser en todo aspecto, no en los que te convenga. En una utopía igualitaria deberías desechar de tu vocabulario todo término separatista o diferenciador y buscar y abrazar todos los términos que homogenicen, unifiquen e igualen. No más hombre – mujer, blanco- negro, chileno – extranjero, etc. Bienvenidos los humanos, las personas, los seres y en esos términos seriamos iguales y no discriminarnos de ninguna forma. ¿O no?

Hasta la próxima y espero que piensen en si discriminan o no. Y en el porqué.

Y recuerden que la comunidad nacional en contra de la discriminación es una entidad privada que se reserva el derecho de admisión (jeje)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola mi querido amigo Rodrigo!! aqui estoy una vez mas leyendo tu blog .... no se porque hoy ... pero aqui estoy...

Es interesante el tema que planteas y por cierto muy polémico! ;) .... Siempre que escucho hablar a algún hombre de este tema ¿porque será que siempre me ocasiona la misma sensación? .... y con esto diras que no estoy del todo de acuerdo con lo que escribes..., esa sensación de victima en una ¿nueva sociedad?, o tal vez no sea esa la palabra ... pero en fin ... lo cierto es que la naturaleza nos ha hecho ditintos tanto a hombres como a mujeres, tal vez para cumplir con ciertos roles unos y otros, tal vez para complementarnos? .... mmmm es complejo saber a estas alturas de la vida la respuesta a estas preguntas... la sociedad a cambiado sip asi es, recuerdas como era antes?....

en aquel entonces también había discriminación? mas o menos? hoy se ha repartido un poco? ... siempre habrá un débil y un fuerte, sera la naturaleza del hombre?

Te escribo mi comentario con mucho cariño y aprecio!! :) besitos! cuidate harto!! saludos!! ;) byeeeee

Rigo dijo...

Compadre, tienes un punto de vista muy similar al mio, me refiero a que yo tambien creo que las acciones dfeben ser asumidas por las PERSONAS no por su color ni su género, sin importar cuales sean, lo que si, no creo que la amabilidad hacia una mujer sea signo de que crees que ellas son inferiores, de hecho existe la caballerosidad entre hombres y en ese aspecto uno no se cree superior al otro, pero en fin, respecto a asumir responsabilidades y a tener en cuenta todos los cachos que involucra esto, debe ser igual para todos.. ah y posiacaso, quiero entrar a la sociadad antidiscriminacion.. vamos!!! si solo soy un poco oscuro pero no tanto!!! jajaja